Home » Jazz Articles » Interview » Carles Benavent, un mar de buenas vibraciones

1,001

Carles Benavent, un mar de buenas vibraciones

By

Sign in to view read count



Hace tres años, Carles Benavent (Barcelona, 1954) iba paseando por los alrededores de la plaza de la Catedral, en pleno Barrio Gótico de Barcelona, cuando un extraño sonido lo atrapó. Era el hang, un nuevo y hechizante instrumento melódico de percusión de origen suizo cuyo sonido marcaría al cabo de muy poco tiempo el nuevo proyecto del bajista catalán.



"Oía de lejos ese sonido y, al cabo de unos segundos, me encontré a Ravid Goldschmidt, a quien yo no conocía, tocando ese extraño instrumento sentado en una calle —recuerda Benavent—. Cuando llegué a casa, hablándolo con mi mujer, me comencé a arrepentir de no haberle pedido al músico su teléfono." Sin embargo, los caminos de Benavent y ese israelí que en 2004 abandonó su país y su instrumento hasta entonces —la batería— para dedicarse, ya en Cataluña, a explorar la belleza magnética del hang, estaban predestinados a encontrarse: "Estaba preparando la música para un ballet que me encargaron cuando los músicos que tenían que participar en él, que todavía no conocía, vinieron a mi estudio. Uno de ellos era Ravid, y le solté: '¡Ahora sí que no te me vas a escapar!."



Así, Benavent empezó desde entonces a familiarizarse con un instrumento todavía muy inusual de encontrar en cualquier disco de jazz: "Aluciné bastante de cómo funcionaba, pero descubrir el hang fue todo un flash. Había tocado hace algún tiempo con Othello Molineaux, cuyo steel drum tiene puntos de contacto, pero el hang era algo nuevo. Me apunté las notas que tenía, que son ocho, y las adapté a mi repertorio, incluso llegando a crear algún tema pensando particularmente en él. Se convirtió en el estímulo que necesitaba para emprender mi nuevo proyecto."



Con Goldschmidt ya fichado, Benavent pensó en dos ilustres veteranos para iniciar la historia de un cuarteto cuyo primer disco, Quartet (Bebyne Records, 2009), acaba de ser publicado y presentarán en la recta final del 41 Voll-Damm Festival Internacional de Jazz de Barcelona: el batería Roger Blàvia, colaborador de músicos como Joan Manuel Serrat, Miguel Poveda, Diego Cortés y Maria del Mar Bonet, y el guitarrista Jordi Bonell, amigo de Benavent desde la infancia. "Me encargaron un proyecto para televisión e inmediatamente pensé en ellos, aunque Bonell se incorporó algo más tarde. Me encantó el color que iba tomando el cuarteto, así que empecé a pensar en un repertorio y en cómo desarrollarlo. Blàvia es un tipo muy despierto, un músico que siempre está a punto. Rítmicamente entendemos las cosas de un mismo modo, y el ritmo es lo que más importa. Con Bonell hace tanto tiempo que nos conocemos que hay momentos en el disco donde tocamos la mandola y el piccolo y no sé realmente qué es lo que toqué yo y qué lo que tocó Bonell."



Blues aflamencado

Haber coincidido en una banda tan definitoria de los años de formación de ambos, Música Urbana, tiene que dar, claro está, sus resultados: "Lo que aprendí con Música Urbana, al igual que con Màquina! y Crac, tuvo una importancia extrema. Siempre encontrarás un fraseo de blues en mis composiciones flamencas, y eso se debe sencillamente a mis tiempos junto a Emili Baleriola en Crac. Íbamos a Andorra y acabábamos con las agujas de nuestros discos de tanto escuchar a Cream, Jimi Hendrix, Bobby King, Kenny Burrell y Barney Kessel. Me encantaban los guitarristas, y con el bajo no hacía más que imitar solos de guitarra."



El resultado de esa unión con Goldschmidt, Bonell y Blàvia, según Benavent, fue un "mar de buenas vibraciones." "El hang transmite una tranquilidad que da muy buen rollo. Es lo que he estado buscando estos últimos años: una sensación de bienestar, que es lo que a mí me provocó el hang y lo que espero que provoque en quien oiga el disco. En los tiempos que corren no está nada mal buscar músicas que reconforten el espíritu y hagan sentir bien al prójimo."



Su compañía discográfica, ni corta ni perezosa, sostiene que el nuevo Carles Benavent Quartet marca "un antes y un después" en la dilatada carrera del bajista, aunque igualar logros como los que el barcelonés consiguió formando parte de las bandas de Paco de Lucía y Chick Corea no es, claro está, tarea fácil: "Se trata de un punto y seguido. Lo verdaderamente importante es que vayan apareciendo esas chispas para poder continuar evolucionando," argumenta.



Valentía y emoción

Tuvo suerte Benavent en 1980 de que el entonces bajista de Paco de Lucía se fuera al servicio militar y el saxofonista y flautista Jorge Pardo y el percusionista Rubem Dantas pensaran en un "chaval de Barcelona" (según se autodefine Benavent) para sustituirlo en un sexteto que, sin ninguna duda, definió nuevas formas de concebir la música flamenca. "Me fui a Madrid y, en el mismo momento en que nos sentamos, vi clarísimo que aquello era un camino muy potente que debíamos seguir. Lo primero que tocamos fue una colombiana, Monasterio de sal, sólo Paco y yo, y ése fue un dueto que, si ahora tuviese que volver a tocar, lo haría prácticamente igual," asegura.



Sólo quiero caminar (1981, Phonogram), el disco resultante, no sólo abrió nuevos horizontes para Benavent, sino también para todo el universo del flamenco, que todavía no se había sobrepuesto al shock emocional que significó el igualmente revolucionario La leyenda del tiempo, de Camarón de la Isla, publicado un par de años antes. "Para algunos, Jorge y yo éramos unos intrusos. Pero para muchos jóvenes éramos también una molada. Aunque recuerdo a alguien pidiéndonos a gritos, en un concierto en Oporto: `Pacoooo, el de la guitarra china, que se vaya....' Pero estábamos segurísimos de lo que estábamos haciendo, pues era algo valiente y con lo más importante de todo: transmitíamos emoción. Sólo hay que mirar la cantidad de músicos que han cogido aquello como referencia." Y remacha: "Los prejuicios no impiden nada. Siempre ha habido y el mundo ha seguido adelante. No me importan nada en absoluto."





Con Chick Corea se conocieron en 1982 en Japón, donde Benavent actuaba junto con De Lucía. Sus dos discos juntos, Touchstone (GRP, 1982) y And again and again (GRP, 1983), adem

Comments

Tags


For the Love of Jazz
Get the Jazz Near You newsletter All About Jazz has been a pillar of jazz since 1995, championing it as an art form and, more importantly, supporting the musicians who create it. Our enduring commitment has made "AAJ" one of the most culturally important websites of its kind, read by hundreds of thousands of fans, musicians and industry figures every month.

You Can Help
To expand our coverage even further and develop new means to foster jazz discovery and connectivity we need your help. You can become a sustaining member for a modest $20 and in return, we'll immediately hide those pesky ads plus provide access to future articles for a full year. This winning combination will vastly improve your AAJ experience and allow us to vigorously build on the pioneering work we first started in 1995. So enjoy an ad-free AAJ experience and help us remain a positive beacon for jazz by making a donation today.

More

Jazz article: Meet Drummer Danny Gottlieb
Jazz article: Kim Parker: Reminiscing in Jazz
Jazz article: Meet Bobby Watson
Interview
Meet Bobby Watson
Jazz article: Meet Brian Lynch
Interview
Meet Brian Lynch

Popular

Get more of a good thing!

Our weekly newsletter highlights our top stories, our special offers, and upcoming jazz events near you.